La historia de la moda en el cine te lleva de vuelta a Autocinema Aire Libre Coyoacán
Hace más de un siglo, en el Salón Indio del Gran Café de París, los hermanos Lumiere proyectaron La Sortie de l'usine Lumière à Lyon, la primera película que fue vista en el mundo. Más que un argumento, presentaba la escena que literalmente describe su título: decenas de trabajadores y personas saliendo de una fábrica, todos con el estilo y las prendas propias de aquella época. Además de la sorpresa que generó ver aquellas imágenes en movimiento, esos primeros espectadores probablemente sintieron una conexión directa con los personajes de ese filme por un aspecto en especial: la ropa.
Hoy, después de décadas y de millones de películas filmadas, ese elemento sigue teniendo un peso fundamental a la hora de vincular aquello que sucede en la pantalla grande con los espectadores. El vestuario, la moda detrás de cualquier cinta, puede darle forma a una época, al carácter de un personaje o incluso sugerir pistas para entender mejor la trama. En resumen: un vestido nunca es sólo un vestido cuando lo vemos en el cine.
Partiendo de los ejemplos más básicos para ilustrar la relevancia que tiene la moda en el cine, podemos hablar de Jack Pierce, quien le dio forma al monstruo de Frankenstein en el clásico de 1931. Pierce se valió, además de una considerable cantidad de maquillaje para crear este personaje, de un vestuario sobrio –un saco, pantalones y una playera negros– que nos recordaba que aquella criatura tenía algo de humanidad en su interior.
De igual forma, en Breakfast at Tiffany's (1961), Audrey Hepburn, en el papel de Holly Golightly, vestía siempre con una elegancia misteriosa que contrastaba con una supuesta inocencia que servía de máscara a esta protagonista. En ejercicios cinematográficos más contemporáneos, como The Phantom Thread (2017), por ejemplo, la moda adquiere un papel protagónico, convirtiéndose en el intermediario y catalizador de un complicada relación entre dos amantes –un diseñador y su modelo– que van tejiendo juntos una convivencia que poco a poco revela su terrorífica silueta.
Otro caso como este último, en el que la moda funge como protagonista, es The Devil Wears Prada (2006), película protagonizada por Anne Hathaway y Meryl Streep, la cual nos retrata un mundo estilizado, lleno de diseños emblemáticos, nombres icónicos y tonos vanguardistas, a la par de una realidad llena de ambición, cansancio, intransigencia y frialdad, elementos que, mezclados, ven nacer a la problemática y adorada industria de la moda.
El argumento de esta película dependía tanto del apartado de vestuario que gran parte del presupuesto fue destinado a este, teniendo piezas únicas que rondaban los $100,000 dólares. Además, algunos personajes están inspirados en algunas personalidades de gran renombre en esta industria, como Anna Wintour, una de las editoras más importantes del mundo de la moda, quien ha sido responsable por establecer tendencias, looks y estilos que marcaron época.
Desde su lanzamiento hace más de una década, El Diablo Viste a la Moda sigue vigente en el imaginario de los amantes de la moda y también del cine. Valiéndose de la comedia, la película nos muestra el duro camino que debe recorrer una joven a lo largo de sus primeros trabajos, enfrentándose a una realidad indiferente que puede desecharla de un segundo a otro.
Sin embargo, también muestra un mundo más amigable, en el que la moda forma parte de nuestras vidas sin que nos demos cuenta –con la icónica escena del cerulean blue iconic, por ejemplo–, y donde todos podemos cambiar aún a pesar de la sólida máscara que vamos forjando para nosotros mismos.
Este tipo de películas nos muestran que la moda, desde el monstruo de Frankenstein hasta Miranda Priestly, puede ser, en vez de un escudo o un mecanismo de defensa, una forma de expresar nuestra propia humanidad.
Revive el clásico El Diablo Viste a la Moda el próximo 21 de febrero a las 19:00 horas en Autocinema Aire Libre Coyoacán se ubica en Miguel Ángel de Quevedo 247, en la colonia Santa Catarina, Alcaldía Coyoacán, CDMX.
Además, durante esta semana se realizará un Open Mic, una divertida actividad para cazar a aquellos talentos ocultos en los espectadores que quieran probar suerte en el escenario contando chistes, anécdotas graciosas o cualquier otra cosa que los pueda llegar a convertir en el nuevo talento mexicano del stand up.
CARTELERA AUTOCINEMA AIRE LIBRE (del 19 al 21 de febrero)
Viernes 19 de febrero
- El conjuro - 19:00 hrs
Sábado 20 de febrero
- ¡Scooby! - 14:30 hrs
- Joker - 19:00 hrs
- Pesadilla en el infierno - 22:15 hrs
Domingo 21 de febrero
- Armados y Peligrosos - 14:30 hrs
- El Diablo Viste a la Moda - 19:00 hrs
Los boletos para asistir a los eventos y proyecciones pueden adquirirse en https://boletia.com/eventos/foroairelibre
Acerca de Autocinema Aire Libre Coyoacán
Autocinema Aire Libre Coyoacán es un nuevo concepto pensado para volver a disfrutar de conciertos en vivo, obras de teatro, shows de stand up, autocinema y muchos espectáculos de diversas índoles, en un entorno seguro y familiar desde el interior de un automóvil o en palcos VIP para hasta seis personas. Autocinema Aire Libre Coyoacán tiene el objetivo de reactivar a la industria del entretenimiento, ofreciendo a los asistentes nuevos formatos en un espacio totalmente seguro para todos: el primer espacio de entretenimiento en CDMX dentro de la Nueva Normalidad, creado y diseñado para adaptarse a las distintas condiciones sanitarias adecuadas para el contexto actual. Autocinema Aire Libre Coyoacán se ubica en Miguel Ángel de Quevedo 247, en la colonia Santa Catarina, Alcaldía Coyoacán, CDMX, con funciones de martes a domingo en diversos horarios. Llevar a cabo un proyecto como Autocinema Aire Libre Coyoacán es posible gracias al apoyo de Lincoln, Pepsi, Telcel, Cielito Querido Café, Nutrisa, Helados Nestlé, McCormick y Philadelphia.
PRESS RELEASE
PDF - 341 Kb
DESCARGA IMÁGENES AQUÍ
Andrés Calderón
Fernando Esquivel